El oído se divide externo, medio e interno y por su estructura puede ser reemplazable.
El oído es el órgano que se encarga de transmitir los sonidos exteriores hacia el cerebro a través de su estructura conformada por el oído externo, medio e interno, cuando alguno de estos falla, su fisionomía tiene la nobleza de ser reparado y restablecer así la audición. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en México se ha logrado la restitución de la audición entre 400 y 500 personas, aproximadamente.
Cuando escuchamos la voz de un ser querido o de una persona importante en nuestras vidas, a nivel químico liberamos serotonina y dopamina lo que provoca que experimentemos una sensación de bienestar y alegría; sin embargo, a nivel auditivo suceden procesos complejos para que a nuestro cerebro llegue la información traducida en sonidos.
La voz o cualquier otro sonido se traducen como impulsos eléctricos debido a las ondas sonoras que se transmiten por el aire y éstas llegan al oído externo, también conocido como pabellón auditivo (la parte visible del oído o la oreja), esta parte del oído capta las vibraciones sonoras y las transmite al oído medio a través del conducto auditivo externo.
Existen diversas soluciones auditivas dependiendo del tipo de pérdida, el implante coclear es una de ellas.
El oído medio contiene el tímpano (una fina capa de tejido) y tres huesos diminutos (llamados “cadena de huesecillos”). El sonido hacer vibrar al tímpano y la cadena de huesecillos amplifica estas vibraciones y las trasmite al oído interno.
En el oído interno se encuentra una cavidad en forma de caracol (cóclea) que contiene líquido y está recubierta por cuatro filas de diminutas células ciliadas. Cuando las vibraciones avanzan por el líquido, las células ciliadas externas se contraen y amplifican el sonido.
Cuando estas vibraciones son lo bastante grandes, el trabajo de las células ciliadas es traducirlas a impulsos nerviosos eléctricos y está información es enviada al nervio vestibulococlear (también llamado nervio auditivo, nervio acústico, octavo par craneal), que manda señales al cerebro para que este las interprete como sonidos. Otra de las funciones del nervio auditivo es la de mantener el equilibrio.
“El oído es una pequeña estructura fascinante y noble, ya que a través de mecanismos imperceptibles para nosotros es que tenemos la capacidad de escuchar, pero que puede dañarse con facilidad a través de diferentes situaciones como: cortes, rasguños, introducción de objetos, golpes en la cabeza o en la oreja, entro otros; afortunadamente su nobleza permite que este sentido sea el único que puede reemplazarse a través de soluciones auditivas”, aportó, Jimena Atuán Rodas Especialista en Audiología, Foniatría y Otoneurología de MED-EL.
Actualmente MED-EL cuenta con cinco soluciones auditivas que ayudan a no perderse de ningún sonido de la vida:
- Implantes cocleares. Ayuda a restaurar el sentido de la audición en personas con pérdida auditiva neurosensorial de severa a profunda.
- Estimulación eléctrico acústica combinada. Este tipo de solución está enfocada para las personas que no pueden oír los sonidos de alta frecuencia, quizás sufra un tipo de pérdida de audición conocido como sordera parcial. La estimulación eléctrico acústica es una combinación de dos tecnologías, un implante coclear para las frecuencias altas y una amplificación acústica para las bajas. Juntas abarcan todo el espectro auditivo.
- Implantes de oído medio. Es la solución ideal para las personas que no experimentan ninguna mejora con los audífonos convencionales o no pueden utilizarlos por razones médicas. Este suele ser el caso de personas con pérdida auditiva permanente después de una intervención quirúrgica en el oído medio, o cuando no pueden utilizar audífonos debido a la inflamación crónica del conducto auditivo (es decir, otitis externa). Puede ser una solución eficaz en casos de pérdida auditiva neurosensorial de leve a severa o pérdida auditiva conductiva o mixta. Con esta solución las señales del entorno se convierten en vibraciones mecánicas. Esta energía mecánica se utiliza para estimular las estructuras del oído medio y así proporcionar una percepción del sonido excepcional en las altas frecuencias.
- Implantes de conducción ósea. Puede ser una solución eficaz para personas con pérdida auditiva permanente tras una operación en el oído medio, malformaciones o, en general, con pérdida auditiva conductiva o pérdida auditiva mixta. También es una opción para personas con sordera unilateral.
- Sistema de conducción ósea. El sistema de conducción ósea es una opción de tratamiento, sin esfuerzo, para personas con pérdida auditiva conductiva o neurosensorial unilateral profunda. Este sistema no requiere intervención quirúrgica, es de fácil manejo y gran comodidad de uso.
El oído es un sentido muy poderoso, pero puede ser propenso a perderse. Si ya hay se presenta algún grado de hipoacusia es de suma importancia atenderse.