La Ciudad de México es un auténtico paraíso para los amantes del buen comer, y entre sus rincones más deliciosos destaca Santa María la Ribera, hogar de una experiencia gastronómica que celebra la tradición italiana con un toque único. Hablamos del Grupo María La Italiana, conformado por tres espacios que enamoran paladares: María Ciento 38, Ninna Pastificio y El Pan de María.
Cada uno con identidad propia, estos lugares comparten un mismo espíritu: ofrecer propuestas auténticas, hechas en casa, que evocan los sabores más entrañables de Italia. Para esta temporada, el grupo presenta una colección de postres y panes que combinan técnica, ingredientes de alta calidad y un profundo respeto por el sabor.
Las imperdibles de temporada
María Ciento 38
La joya gastronómica de la colonia desde hace más de 8 años
Cuore di Lampone (Corazón de frambuesa): Una obra de arte dulce hecha con pasta quebrada, crema pastelera artesanal sabor vainilla con vaina originaria de papantla veracruz, frambuesas frescas, bizcocho hidratado con jarabe natural de cereza y coronado con una suave crema de mascarpone y compota de frambuesa.

Nido dolce a la ricotta e fragola: Masa brioche con ricotta y mermelada de fresa, decorado con almendra y azúcar glass. Una pieza única para quienes disfrutan de la armonía entre lo dulce y lo salado.

Palmier di sfoglia con ricotta dolce e mirtilli: Versátil y delicioso, con masa de croissant crujiente rellena de ricota y bluberry.

Ubicación: Santa María La Ribera 138, Cuauhtémoc, CDMX.
Pero eso no es todo, existe tambien Ninna Pastificio, el rincón más dulce de la pasta italiana
Nuvola di lamponi: Bizcochuelo de tono rosa intenso con reducción de frambuesa, relleno de crema pastelera y decorado con compota de frambuesa, fresas y decorado .

Cuscino di Ricotta e Fragole: Masa suave en forma de almohada, rellena de ricotta y mermelada de fresa. Una explosión de sabor que conquista a cada bocado.

Ubicación: Jaime Torres Bodet 135, Sta. María la Ribera, Cuauhtémoc, CDMX.
Además de estas delicias, los visitantes pueden maridar sus postres con una selección especial de cafés artesanales o un limoncello casero, elaborado con el mismo cuidado que caracteriza a todo el grupo.
No dejes de visitar y disfrutar de esta ruta de sabor italiana en pleno corazón de la CDMX.